Wednesday, March 14, 2007

Diario, 14 de marzo 2007

Ayer, escuchando un disco de George Harrison, tuve una experiencia demoledora.

Changing. Sun. World. Every one. Love. Comes. Cómo pronunciaba esas palabras.

Sus años dedicados a los Beatles. ¿Habrá sentido una palpitación mejor? ¿Algo más excitante?

o todos somos siempre un poco aburridos un poco miserables? o sólo serán los ojos de la

idealización lo que hace lo hermoso?

Ayer, escuchando un disco de George Harrison, tuve una experiencia demoledora.

A veces la compartía con vos. Era una fiesta de esas con música de George Harrison detrás.

Fiestas en las que decidimos estar tristes y ser como verdarderamente desaríamos ser: tan

tristes en alegres movimientos, en movimientos de cruxifición y risa.

Fraternidad y amor por tu compañía. Deseos de escribir. Deseos de ser salpicada por el mar.

3 comments:

defecto föhn said...

no es la mente, no es el buda, no es nada, pequeña boddhisattva.

paula p said...

(este me mocionó)

Anonymous said...

extraño tu compañia querida sola no se puede tan